las arquitecturas Zen 4 y RDNA 3 . Quiere mejorar continuamente sus productos y aspira a mejorar aún más su rendimiento por vatio.
La eficiencia energética y el rendimiento en el centro de la evolución
AMD acaba de lanzar los procesadores de la serie Ryzen 5000 basados en la arquitectura Zen 3 y las GPU de la serie Radeon RX 6000 basadas en RDNA 2 y ya está trabajando en el diseño de las próximas generaciones. Los procesadores Ryzen serie 5000 fueron lanzados el pasado 5 de noviembre. Las tarjetas gráficas de las series Radeon RX 6800 y Radeon RX 6800 XT se lanzarán el 18 de noviembre, mientras que las ventas de la Radeon RX 6900
Los procesadores Zen 4 se fabricarán mediante una de 5 nanómetros . El proceso de grabación de RDNA 3 aún permanece en secreto. En cualquier caso, Bergman, vicepresidente ejecutivo de AMD, afirma que el proceso de fabricación utilizado por la RDNA 3 será mejor que el utilizado para las tarjetas gráficas de última generación Radeon RX 6000. La memoria Infinity Cache será cada vez más popular para las generaciones futuras . Cabe señalar que RDNA 2 tuvo un aumento del 50% en el rendimiento por vatio en comparación con la arquitectura RDNA 1. La nueva arquitectura RDNA 3 hará lo mismo según el portavoz de AMD en The Street.
¿Por qué centrar el desarrollo en el desempeño energético?
El rendimiento por vatio es muy importante según AMD porque si el consumo es lo suficientemente alto, los jugadores tendrán que invertir en fuentes de alimentación fuentes de alimentación sistemas de refrigeración demasiado avanzados. Lo que hace que el coste global final sea bastante elevado. Por lo tanto, AMD hace todo lo posible para ofrecer productos que no requieran demasiada energía para reducir el costo general.
Esto es aún más cierto en el caso de los portátiles, porque el espacio utilizado es cada vez más limitado. Por tanto, AMD promete soluciones que no requieren un sistema de refrigeración adicional.
El rendimiento no suele ir de la mano de la eficiencia energética. De hecho, cuanto más se amplíe el bus de memoria y aumente la velocidad, mayor será el consumo. AMD afrontará el desafío siguiendo utilizando la memoria caché Infinity, ya presente en las GPU de última generación. Además del tamaño reducido derivado del proceso de grabado de 5 nanómetros, también se realizarán mejoras, entre otras cosas, en el IPC, el sistema de caché y el socket que evolucionará hacia AM5. Este último admitirá memorias DDR5.
Se lanza así la carrera por el rendimiento. AMD no da ningún respiro a sus competidores. El año 2021 ya promete ser rico en avances tecnológicos.